Nuestra Ciudad Otaku tuvo este martes 24 de septiembre una noche especial en la que una familia se reunió para recordar viejos tiempos y conocer nuevos proyectos. Te hablamos de la premier de Dragon Ball Z: La batalla de los Dioses y como somos ajonjolí de todos los moles, anime.es estuvo ahí para traerles una crónica…
Definitivamente sabemos que no todo es fama y fortuna, por suerte en mis largos años de permanecer en este plano llamado Tierra he tenido la oportunidad de presenciar buenos momentos en los que es posible recordar que en el fondo todos somos una gran familia.
La nueva película Dragon Ball Z: La batalla de los Dioses (Dragon Ball Z: Battle of Gods) ha causado revuelo en nuestra comunidad y muchos han sido los rumores, el trabajo y los diferentes esfuerzos relacionados con ella.
Los amigos de Diamond Films tuvieron a bien voltear su mirada para dedicar un momento a la convivencia y a rendir honor a quien honor merece, pues los actores de doblaje han sido en gran medida el ojo del huracán en el tema de la llegada de esta cinta a nuestro país, por lo que antes del estreno de Dragon Ball Z: La batalla de los Dioses la producción del doblaje decidió dedicar una presentación especial y casi “Top Secret” a la que acudieron los actores de doblaje y sus familias para disfrutar del resultado de dicho esfuerzo.
Hay días en que las cosas simplemente suceden y para nuestra fortuna, pudimos ser parte de un momento que convirtió a una noche de cine en algo que va más allá de la magia y la nostalgia para crear la verdadera antesala a lo que será un rotundo éxito
Al momento de llegar todos comenzaban a bromear con el chico de la puerta a cargo de la lista de invitados, se presentaron como tres Mario Castañedas por lo que yo creo que en una siguiente ocasión se va a pedir que les proporcionen una lista con fotos además de nombres.
Mientras el vestíbulo del cine ubicado en Reforma 222 comenzaba a llenarse quedaba claro que se trataba de algo más que una simple función de cine, una gran familia comenzaba a reunirse.
Los saludos, los abrazos y las fotos iban en aumento mientras que entre bromas y risas todos nos formamos para comprar golosinas, después de todo, qué sería del cine sin palomitas de maíz.
Ya en la sala la experiencia era verdaderamente irreal, las luces casi apagadas y todos llegando uno por uno y saludando a los que ya se encontraban sentados, pero mas allá de parecer una escena de cine de pueblito donde todos se conocen, la oscuridad te permitía disfrutar la verdadera magia que flotaba en el ambiente… las diferentes voces se mezclaban y podías escuchar bromas y comentarios entre DeeDee y Elmo, entre Vegeta y MacGyver, Kaiosama saludando a Milk o Trunks jugando con Naruto. Un grupo que se conoce desde hace tiempo, pues todos son actores de la ANDA y que para ellos la película había sido un reencuentro con viejos compañeros de carreras largas y muchas anécdotas. Las presentaciones familiares entre aquellos que han compartido muchas horas en una cabina grabando episodio tras episodio, niños pequeños saludando a quienes han escuchado y que identifican como héroes o villanos además de compañeros de trabajo de sus papás. René García diciendo: Hola Insecto! Cada que ingresaba otro compañero a la sala fue verdaderamente memorable.
Después de lo que parecía una larga espera la producción agradeció a los actores y sus familias permitiéndoles disfrutar del resultado final, la tan esperada película: Dragon Ball Z: La batalla de los Dioses
Dejaré que la película hable por si sola, definitivamente la experiencia de disfrutarla en cine es algo que no podemos dejar pasar, nuestra comunidad siempre ha dicho merecer eventos de calidad y ahora tenemos la oportunidad de disfrutar de una buena producción y con un doblaje que en buena forma fue impulsado desde la misma al exigir el esfuerzo de una gran variedad de actores que fueron convocados para participar.
No puedo dejar de mencionar que el comentario sobre los 26 minutos… cuando vean la película me entenderán, es un ad lib que podría considerarse un tributo a nuestra otakuzidad.
La película es muy buena y con un excelente balance entre nostalgia e innovación para una saga como Dragon Ball, el doblaje hace exactamente lo mismo al combinar nuevo talento junto a voces que más que ser emblemáticas son la representación misma de la infancia de muchos de quienes veremos la película en cines. Definitivamente la película anime será un éxito entre nuestra comunidad, antes de tirar tu dinero en una mala copia siempre voy a preferir disfrutarla en una buena sala de cine porque aún recuerdo cuando los cines eran como teatros y los que disfrutábamos la película aplaudíamos al final, vitoreando al héroe y rechiflando al villano en cada escena, tal como sucedía en esta ocasión pues en diferentes escenas cada actor se reía de su escena compartiendo el momento al lado de su familia.
No tengo ninguna duda de que habrá mas de uno por ahí aplaudiendo al final de cada función, porque además otro homenaje a los verdaderos fanáticos de una saga tan extensa como ésta es disfrutar los créditos de la película que se encuentran ilustrados de una forma genial y que te lleva a recordar cada etapa de la vida de Son Goku.
